Moka y el gato con espinacas


Moka es una niña de cuatro años que vive en una casa de campo. A Moka le gustan muchas cosas, empezando por los gatos, las flores, las regaderas... pero hay algo que no soporta y es todo aquello gris, lo negro. Por eso Moka tiene mucho miedo a la noche, a la oscuridad, a todo aquello que se esconde en el color de las sombras.
Sin embargo, las sombras, que lo saben, la visitan todas las noches…¡y algunos días también!
Moka y el gato con espinacas es un cuento sobre el miedo a lo desconocido, a la noche. Pero también es un cuento sobre los deseos, los sueños. ¿Y los deseos, nuestros anhelos, no están revestidos de misterio?, ¿de verdad, deseamos lo que deseamos? ¿Comprendemos lo que conllevan nuestros deseos?
Moka pronto aprenderá que los tesoros están casi siempre escondidos y que en aquello que a priori rechazamos, puede esperarnos la felicidad.
¡Moka, sólo hay una manera de averiguarlo, adentrándote en lo desconocido!
Moka deambulará entre parajes y sensaciones de gran belleza poética que ella interpretará con la ilusión e inocencia propia de su edad. Un cuento para disfrutar padres e hijos pues es un relato que habla de la esencia del hombre, la capacidad de soñar, dormido, la capacidad de sorprenderse, despierto.
Coco del Pino y Alessio Ravani han sembrado el camino de los sueños de Moka con maestros entrañables como una margarita, un diente de león o un molinillo de viento para vencer a malvadas algas, espectrales ojos y árboles lúgubres. Todo ello para afianzar el sueño de Moka.
«¡Sí, tengo mi deseo, es un gato, quiero un gato, de verdad! Ya como lenguado y merluza, así que creo saber que lo quiero de verdad…»
Este cuento nos recuerda que hay que tener mucho cuidado con lo que se desea, ¡pues a veces se cumple!
Las ilustraciones de Coco del Pino han recogido el espíritu del cuento, inocencia e intensidad de sentimientos, miedo, sorpresa, temor, alegría, ensoñación, y mucha energía en los dos "trastos" que son Moka y su gato Sombra.
¿Estás preparado para realizar tu deseo?
¿Eres capaz de cambiar para ello?
Recuerda que los gatos vienen con espinacas, y a veces, incluso con acelgas.

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